03, jun 2022
5 de junio: Día mundial del Medio Ambiente
Una sola Tierra
La Tierra se enfrenta a una triple emergencia planetaria: el clima se calienta a un ritmo demasiado rápido para que las personas y la naturaleza se adapten; la pérdida de hábitat y otras presiones sobre la naturaleza han conllevado a que aproximadamente 1 millón de especies estén en peligro de extinción; y la contaminación continúa envenenando nuestro aire, tierra y agua.
La buena noticia es que nosotros podemos ser parte del cambio y de la solución, generando acciones que cuiden nuestro planeta y no lo sigan dañando.
#UnaSolaTierra es la campaña del Día Mundial del Medio Ambiente 2022 en la que se pretende concienciar sobre estas tres crisis, a la vez que se anima y fomenta la celebración, protección y restauración de nuestro planeta a través de diversas actividades.
¿Qué es el Día Mundial del Medio Ambiente?
Dirigido por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y celebrado cada 5 de junio desde 1973, el Día Mundial del Medio Ambiente es la plataforma mundial más grande para la divulgación ambiental y lo celebran millones de personas en todo el mundo. Cada año lo auspicia un país diferente, y en este 2022 el anfitrión y organizador es Suecia.
¿Por qué necesitamos que participes?
El tiempo se acaba y la naturaleza se encuentra en situación de emergencia. Para mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 °C este siglo, debemos reducir a la mitad las emisiones anuales de gases de efecto invernadero para 2030. Si no actuamos ya, la exposición a aire contaminado aumentará en un 50% en esta década, mientras que los desechos plásticos que fluyen hacia los ecosistemas acuáticos podrían triplicarse para 2040. Pero estas no serán las únicas consecuencias. Le seguirán muchas más.
Necesitamos una acción urgente para abordar estos problemas apremiantes, haciendo que “Una sola Tierra” y su enfoque sobre una vida sostenible en armonía con la naturaleza sean tan pertinentes como siempre.
Hagamos nuestra vida sustentable: Miremos y revisemos nuestras acciones: Nuestro gasto energético, nuestro uso del transporte, cómo vivimos en nuestras ciudades, cómo y dónde gastamos nuestro dinero, cómo nos alimentamos y hasta lo que hacemos para divertirnos. Hasta el más mínimo cambio genera impacto, ¡así es que no te quedes abajo!